
Para que un matrimonio sea un éxito, cada uno de los esposos debe sentir entusiasmo por lo que hace el otro y no creerse amenazado por los intereses que no sean comunes. No empieces el tuyo negando lo que eres, porque si no, nunca llegarás a ser todo lo que puedes ser. No hay nada mejor en el mundo que la tierna presencia de una persona que cree lo mejor de ti, y confío en que esta boda os lleve a los dos a conseguir grandes logros. Me complace decir que encontré a mi pareja ideal -una vez- y espero que tú hayas encontrado la tuya.
Con cariño,
Abuelita
Elizabeth Forsythe, Una mujer de recursos, 1978
Comentarios