Poet's Abbey (Blog de lecturas)


Entre el pasado y el futuro


La educación es natalidad en medida que el niño o la niña nace al mundo. El mundo es extraño para ellos, y ellos están en un estado de convertirse ("a state of becoming"). 

Parece que las escuelas son lugares que prefieren inculcar capacidades y habilidades antes que enseñar conocimiento. Sin embargo, ¿de qué sirven las competencias sin un conocimiento crítico? 

En educación, la autoridad significa la responsabilidad por el mundo. El maestro es aquél que abre la ventana y señala al pequeño qué es el mundo, y le guía y le acompaña en el proceso de aprendizaje de un conocimiento para saber leer el mundo. No hay nada peor que un adulto que rechace la autoridad de responsabilizarse ante unos niños que nacen al mundo. 

Esta crisis de la autoridad en la educación se enlaza con la crisis de la tradición, que es la actitud hacia el reinado del pasado. El gran problema de esta doble crisis del sujeto y del canon, de la autoridad y de la tradición, es enseñar a los niños a describir qué es el mundo y qué capacidades o competencias necesitan para hacer tareas, pero no instruirlos en el arte de ser, vivir y transformar el mundo.

Sólo un maestro que sepa amar pueda asumir la responsabilidad de preparar a cada niño y niña en la tarea de renovar un mundo común. 

La genial pensadora Hannah Arendt nos advierte del peligro de mirar al mundo con prejuicios, sobre todo en la escuela. Si un maestro se carga de ideología no podrá educar verdaderamente a los jóvenes, porque les impedirá experimentar la realidad y reflexionar sobre esa experiencia. Por eso, lo esencial no es enseñar respuestas, sino enseñar preguntas.



Una crisis nos obliga a volver a plantearnos preguntas y nos exige nuevas o viejas respuestas pero, en cualquier caso, juicios directos. Una crisis se convierte en un desastre sólo cuando respondemos a ella con juicios preestablecidos, es decir, con prejuicios. Tal actitud agudiza la crisis y, además, nos impide experimentar la realidad y nos quita la ocasión de reflexionar que esa realidad brinda.

Hannah Arendt, La crisis en la educación, Entre el pasado y el futuro, 1961

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